Enlace+ Artículo: He aprendido

Enlace+ Artículo: He He aprendido algo de la vida…. 

Es que algunas veces los momentos más oscuros nos pueden traer a los lugares más brillantes. Que los regalos más preciosos en nosotros muchas veces solo el dolor y el proceso pueden desenterrar. 

He aprendido que la gente más tóxica nos puede enseñar las lecciones más importantes. Que nuestras luchas más dolorosas pueden otorgar el crecimiento más necesario. Y que las más desgarradoras pérdidas de amistad y amor pueden dar lugar a las personas más maravillosas. 

He aprendido que lo que puede parecer una maldición en el momento puede más bien ser una bendición. Que en busca de un milagro se nos olvida que podemos ser el milagro de alguien más. Y que nuestro éxito no es medido por los reinos que construimos, sino por las personas que construimos. 

He aprendido que lo que parece el final del camino es de hecho el descubrimiento de que estamos destinados a viajar por un diferente camino…y que los caminos difíciles muchas veces llevan a destinos hermosos. 

He aprendido que cometer errores es mejor que fingir perfección. Que los errores son semilla para tus milagros más grandes…Y que nuestras más grandes debilidades son la más grande plataforma de Dios para mostrar Su poder en nuestras vidas. 

He aprendido que lo que pensamos que es un rechazo es en realidad una re dirección de Dios. Que el camino a la resurrección está a menudo llena de rechazo. Y que antes de amar tus sueños, aprenderás a amar tus heridas. Que antes de ser oasis serás un desierto. y que antes de rugir, temerás la noche en la selva. 

He aprendido que no se trata de lo mucho que hemos perdido, sino de cuánto nos queda. Que lo que ha sido removido en nuestras vidas, es porque probablemente no sea necesario para nuestros futuros. 

He aprendido que algunas de las decisiones que tememos tomar, son las decisiones que nos liberarán. Que al otro lado de nuestra crucifixión esta nuestra resurrección. Que no importa lo difícil que parezca, siempre hay esperanza. Y que no importa que tan imponentes nos sintamos o que tan terribles se ven las cosas, no podemos darnos por vencidos. Tenemos que seguir adelante…incluso cuando da miedo…incluso cuando toda nuestra fuerza parece haberse ido…tenemos que continuar levantándonos y moviéndonos hacia delante, porque con lo que sea que estemos luchando en el momento pasará y llegaremos a salvo. 

He aprendido que todo es parte del proceso y que Dios no desperdicia nada… que las dificultades, retrasos e injusticias funcionarán para nuestro bien si mantenemos la actitud correcta. Y que solo porque estemos en un lugar incierto no significa que no tengamos un propósito cierto. 

He aprendido que Dios usa nuestras decepciones para desarrollar nuestra fe. Que es con frecuencia en nuestro lugar de más grande frustración que Dios revelará Su más grande gloria. Y que a lo que somos llamados es más importante que de donde hemos venido. 

He aprendido que cada puerta cerrada no es un retroceso, sino una disposición de Dios de llevarnos al lugar correcto. Que muchas veces Él nos lleva a aguas profundas porque nuestra duda no se puede hundir en tierra seca. Y que saber QUIÉN está con nosotros es más importante que saber a dónde iremos. Que un destino alcanzado, es un propósito que rechazó la derrota. Y que las experiencias desagradables son los catalizadores para construir el carácter requerido para nuestro destino. Que la presión en nuestras vidas no solamente nos hará más fuertes, pero probarán en lo que nos hemos estado parando. Y que cuando le pides al cielo más fuerzas, muchas veces te dará luchas para hacerte IMPARABLE. Hemos llegado hasta aquí…podemos atravesar con victoria lo que sea que venga después. Las más grandes victorias en nuestras vidas vendrán con frecuencia de nuestras más grandes batallas…los problemas son entrenamiento. Pues cuando sabes de donde viene tu llamado, puedes estar seguro en cómo resultará tu batalla.

Hay tanto más por aprender…hay tanto más por conquistar…

Caleb Alducin Vollrath.

Comments

Popular posts from this blog

Day 95: No Blessing Goes Uncontested (Psalm 41:1–6, Luke 9:57–10:24, Deuteronomy 1:1–2:23)

I Hear His Whisper..."Trust my timing."

Su devocional diario - Cómo nutrir nuestra fe